jueves, 12 de julio de 2007

Gran Premio Ciudad de León

Visto que mi análisis crítico del Gran Premio Ciudad de León, ha podido llevar a confusiones, me gustaría matizar un par de ideas para que queden claras.
Mi crítica iba dirigida hacia a dos personas (entrenador y atleta); y aunque en parte parecía que también criticaba a los organizadores, la parte que corresponde a estos es la de no quedarles otro remedio que ceder ante el poder de dicho entrenador hoy día en el atletismo de esta provincia.
En cuanto al apoyo que se da a este deporte en la ciudad de León, yo solo voy a hablar a lo que mi persona se refiere. La verdad es que llevo unos cuantos años trabajando en esto y el reconocimiento que tengo es nulo, y sobre todo lo he comprobado este año. Durante esta temporada he conseguido el ascenso con el Universidad de Salamanca, y he salido en la prensa salmantina como uno de los artífices del mismo, me han llamado de radios locales para entrevistarme en directo tras la consecución de mis marcas, en su tiempo se reconocio mi medalla en el campeonato de España Promesa, y un largo etc.
Pero bueno estas cosas suelen ser asi, y en la ciudad de uno es más dificil conseguir el reconocimiento. Aunque yo se que hay gente que si me lo reconoce, entre ellos todos aquellos que han entrenado conmigo, y sobre todo los tres entrenadores que tienen la culpa de que este en este mundo: Luis Cueto, me metió el gusanillo; José Manuel Gavela, en un año me enseño que sufrir entrenando era divertido y era mi destino; y Carlos Burón, que ha creado el monstruo en el que me convertido.
En definitiva mis criticas se centran, en los dos sujetos a los que hago alusión y su manera de actuar.

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“Un lanzador de jabalina tiene la fuerza de un lanzador, la velocidad de un velocista, la potencia de despegue de un saltador y la coordinación de un gimnasta” Jan Zelezny